Ya regresaron…
las risas incontenibles,
gritos desaforados
y palabras a destiempo.
Las carreras por todos lados,
los juegos sin afán,
las preguntas incesantes,
las distracciones constantes.
Llegaron con todo,
con las tiernas imprudencias,
los antojos inesperados
y los apuntes anhelados.
Aquí están, con sus picardías,
en el salón y en el patío,
con su equipaje de travesuras,
con su alegría y ternura.
En medio de expectativas,
y de tensiones vigentes
aquí están con sus atisbos,
de sueños inocentes.
Nora Liliana Vásquez Pérez