jueves, 2 de junio de 2011

ELOISA VASCO…UN LEGADO SIGNIFICATIVO


“Una larga vida y una larga experiencia me han llevado a entender que tenemos la tentación de llenarnos de palabras sobre la educación y por el camino de tantas palabras nos hemos extraviado y corrido el riesgo de sacrificar los sueños que inicialmente inspiraron las palabras. Proponemos que es necesario hacer un alto en el camino y nos reencontremos con nosotros mismos. Que cada uno de nosotros se pregunte por lo esencial de su sueño como docente y que se reencuentre con él.

Si la investigación es parte de ese sueño, hagámosla con seriedad y rigor; cultivemos el espíritu investigativo, sin pretender lo que él no puede dar; seamos honestos con lo que podemos hacer y aceptemos nuestras propias limitaciones; seamos respetuosos de nuestros alumnos y señalemos para ellos un camino que cada uno pueda transitar en su irrepetible individualidad. Estemos convencidos de que un maestro solamente puede señalar ese camino, y de que habrá cumplido su más alta labor cuando el discípulo siga adelante solo y el maestro se encuentre de regreso hacia el silencio”.

Eloísa Vasco Montoya
q.e.p.d

Sabias palabras desde el saber y la experiencia de una maestra modelo, que ha partido a la paz del Señor y ha dejado un legado, en el ámbito educativo de Colombia.
Comunicó su pasión por la enseñanza y compromiso con la investigación como un camino de transformación, se mostró siempre reflexiva y cercana.
En sus libros convoca a los maestros a darle altura a nuestro saber, a respetar  a los alumnos y a creer en el sueño de la educación. ¡Reconocimiento a tan grande maestra!
Ojalá fuéramos todos los maestros capaces de dejar tan honda huella en nuestro hacer diario, ganar el respeto de alumnos y colegas y hacer perdurable nuestro saber en bien de las futuras generaciones y  de los cambios educativos.
Pero lo que le merece el mayor reconocimiento es la humildad con la que asumió su proceso de aprendizaje y comunicación, su tarea formadora de maestros, esto se hace  evidente en la frase citada al inicio en la que deja claro su llamado a asumirse humano, vulnerable, en construcción y comprender la realización de nuestra tarea docente en el progreso del otro, en la autonomía plena del alumno.

¿Estamos los Maestros de la Normal, en sintonía con este llamado?

Nora Liliana Vásquez Pérez