Soledad en la multitud,
carencia en la abundancia,
crecen muchos niños y jóvenes
en paradojas extrañas.
Se sienten tan perdidos,
confundidos, desorientados
y nosotros muchas veces
mirando a otro lado.
Hondas preocupaciones,
inestabilidad, desasosiego,
angustia, ansiedad,
sensación de brevedad.
Nadando en el sin sentido,
decepcionados, aburridos,
se pierden en la tristeza,
la depresión les apresa.
¡Reaccionemos!.¡Actuemos!
démosles una esperanza,
que recuperen ilusiones,
que reconforten su alma.
Son los niños y jóvenes,
tesoros de la humanidad
generación que merece
protección y oportunidad.
Anhelan nuestro cariño,
nuestro apoyo coherente,
confianza, motivación,
¡Rescatarlos es urgente!
Nora Liliana Vásquez Pérez
Nuestra misión siempre irá más allá de un saber... Debe valerse de todo aquello que podamos provocar en ellos pues no son el futuro son el presente que debemos forjar
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